Se añora lo que no se tiene y nos pasa desapercibido los momentos insignificantes que nos regala la vida. Siempre ocurre lo mismo, unos vienen, otros van y en el camino sentimos que no vivimos bastante, que no amamos del todo, que no hablamos sobre nuestras verdades, sino que enarbolamos las de otros.
Pero estos poemas confidentes, emergen del corazón descubriendo la verdadera esencia escrita en forma de sonetos o elegías, entre coplas o cuartetas… como si despertaran de su letargo para reconocerte en cada verso. Trazos ilegibles que reescribes entre tachaduras… porque cuesta imaginar y mucho más reconocerse a sí mismo. Da miedo. Incluso desde tu oscuridad, debiste escuchar tu pálpito mucho más de lo que lo hiciste. Hubieras sido más feliz. Hubieras encontrado la libertad de ser aquello que te hizo único, SEMPITERNO.
AROMAS DE MIS RECUERDOS
A heno recién segado
A paja recién cortada
A pan recién horneado
Así, me huele tu casa.
Cuando llego de improviso
Tú escondes las enaguas
Y así me huele el pañuelo
Que te quité una mañana.
Y el pelo cuando lo lavas
Y el perfume que tú gastas
Y el aire que por tí pasa.
Y el aroma de tus flores
Que perfuman tu jardín,
Así, me huele tu alma.
A Emi, el amor de mi vida. Te echo de menos…
Febrero 2005
Este poema inspira una receta impregnada de aromas, texturas y sabores, uno de sus platos preferidos, para hincharse a “mojar pan”, BACALAO A LA VIZCAÍNA.
