Autora: Irene Colmenares.
Ya estamos en el último mes del año y, con él, todos los sentimientos que me despiertan las fiestas más entrañables.
Cierro los ojos y lo primero que me viene a la mente son aromas. Olores que me llevan directamente a esos días de navidades blancas, cargados de frío y tan llenos de alegrías.
Y es que, el olor a castañas asadas me transporta a momentos únicos e inolvidables, es el aroma de la Navidad en su estado más puro. Es hogar y esperanza, en todo su esplendor.
Quizá sea por las tradiciones que, desde siempre, compartimos en casa. Pase lo que pase, todos los años, tenemos nuestro día navideño en Madrid. Paseamos por sus calles, llenas de luces y de melodías, visitamos todos los puestos navideños de la Plaza Mayor, los belenes, los árboles y sus adornos, los colores de la plaza,el sonido de las zambombas y panderetas. Y siempre, terminamos en el puesto de castañas asadas para no olvidar el sabor de la navidad.
Hace algunos años, aprendí a preparar vino caliente, al estilo de los países del norte de Europa, a base de manzanas, hinojo y anís. Desde entonces, no ha faltado en mi mesa estos aromas y su calor a hogar que inunda cada rincón de la casa.
Las pasas, guarnición por excelencia, su dulzor y aroma en todo lo que tocan, es el mejor acompañamiento de todos mis platos festivos.
Espero no perder estos sentimientos nunca y transmitirlos a todos los que quiero. Espero que todos vosotros, encontréis en cada bocado de vuestras recetas, el sabor a hogar que estas fiestas me producen.
Creo que, no hay ningún otro deseo que ambicione más, que compartir la magia de la navidad y envolver de luz y energía positiva mi hogar y a todos los míos.
Os deseo, de todo corazón, que seáis capaces de llenar vuestros hogares de todos esos aromas y sabores que os recuerden la verdadera magia de la navidad.
¡Feliz y Próspera Navidad para todos!
Si quieres leer la receta que ha inspirado esta historia: ENSALADA TEMPLADA DE NAVIDAD
Sobre Irene Colmenares
Irene Colmenares es naturópata, terapeuta manual y cosmetóloga. La singularidad de Irene es su perspectiva ante la vida, su cercanía y vocación por ayudar a la gente a conseguir su equilibrio. Esta empatía con todo aquel que llega a su consulta personalizada, convierte a esta terapeuta, en el ungüento mágico que todo lo puede.
Sus talleres de cosmética natural y alimentación saludable son, además de muy divertidos, tremendamente prácticos.
Si quieres aprender cómo mejorar tu calidad de vida y cuidar cuerpo y mente, sacando el máximo partido al entorno que te rodea, tienes que apuntarte a alguno de sus talleres.
Estoy feliz de presentaros sus primeras entradas y espero que, aquí, en Historias entre Fogones, contemos con su inestimable colaboración, mucho tiempo.
Toda la información, fechas de sus próximos talleres, charlas y terapias: En el blog de Irene Colmenares.
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Quiero agradecer a Irene esta maravillosa entrada. Mil gracias de todo corazón por tu aportación a Historias entre Fogones. Bienvenida a tu casa, Irene.