CREMA DE CALABAZA

Autora: M.L. Ventura

Ingredientes para 4 personas

Media calabaza.

1 patata mediana

1 cebolla mediana

2 zanahorias.

1 puerro.

Una pizca de nuez moscada

Una pizca de pimienta

1 litro de caldo de ave

Un chorrito de aceite de oliva virgen extra

Un chorrito de nata (opcional)

Entre Fogones

La crema de calabaza es un plato perenne en mi casa. Lo tomamos frío o caliente según la estación del año, aunque he de reconocer que es más frecuente entre el otoño y el invierno porque durante la primavera y el verano nos conquistan las ensaladas, los gazpachos y los salmorejos.

Aunque no es difícil de elaborar, como ocurre con casi todo en la vida, para que nos salga exquisito es imprescindible hacerlo con cariño y dedicación, y después que cada uno le ponga su toque personal para que alcance la excelencia en el hogar donde se sirva.

Paso a Paso

En una cacerola honda ponemos un chorrito de aceite de oliva a fuego medio.

Mientras se calienta cortamos todas las verduras en trozos del mismo tamaño más o menos, a fin de que se haga todo por igual. El grosor es indiferente ya que después se tritura todo, pero debemos tener en cuenta que, cuanto más pequeño sean los trozos antes se cocinarán.

Con el aceite caliente, echamos la cebolla, el puerro, las zanahorias y la patata hasta que cambien de color.

Seguidamente añadimos la calabaza y lo tenemos rehogando todo hasta que estén blandas. Este proceso completo nos llevará unos 25 minutos.

Le echamos una pizca de nuez moscada y otra de pimienta. Yo no utilizo sal, pero se puede añadir un pellizco.

A continuación añadimos el caldo y lo tenemos cociendo a fuego suave unos 30 minutos aproximadamente.

Cuando está todo bien cocido, pasamos la batidora y trituramos hasta integrar todos los ingredientes y obtener una crema homogénea de un precioso tono naranja.

Si queremos suavizarlo de color y consistencia, podemos añadirle un chorrito de leche y mezclarlo con la batidora hasta que esté bien fusionada.

Se puede utilizar agua en lugar de caldo, a mí personalmente me resulta más sabrosa con caldo de ave, aunque también se puede usar uno de verduras.

Hay quien le añade un quesito cremoso.

Presentación:

Servir en cuenco o bol y adornar con un chorrito de nata, o de aceite de oliva y unas hojas de perejil.

Se puede servir con picatostes de pan frito, tiras de jamón, pipas de calabaza, uvas sin semillas, almendras troceadas, queso rallado….…. Las composiciones son infinitas. ¡A gusto de el/la cociner@!

¡Et, bon appetit!

Si quieres leer la historia que ha inspirado esta receta: Y LOS SUEÑOS, SUEÑOS SON.

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